PREVENGAMOS EL SUICIDIO....SALVEMOS VIDAS

En la actualidad nuestro mundo ha sufrido muchos cambios, climáticos, políticos, económicos, sociales, etc. y esto desgraciadamente esta afectando lo mas importante en nuestras vidas nuestra “Salud interior” lo que se ve reflejado en los altos índices de suicidio en jóvenes, es una desgracia que estemos perdiendo vidas a causa de falta de información o por no darle la importancia necesaria a nuestros jóvenes, tomemos en cuenta las pequeñas señales están a nuestro alrededor, porque dentro en esas señales esta una esperanza de vida o un grito de ayuda.

Es por eso que esta ocasión les compartiré unos puntos muy importantes ante la situación del suicidio.
El suicidio en México se ha convertido en la tercera causa de muerte entre los jóvenes. Más del 50 por ciento de los casos en este último año correspondió a personas con edades entre 20 y 30 años; otro 20 por ciento a menores de 20 años.

Algunos grupos de adolescentes con depresión tienen más riesgo de suicidarse porque tienen otra enfermedad mental, por ejemplo trastornos de ansiedad, de conducta o la adicción a sustancias tóxicas.

La depresión es potencialmente peligrosa cuando se asocia al suicidio pues al tornarse crónica hace que el individuo tenga, en primera instancia, pensamientos de muerte. En una segunda etapa el individuo deprimido comienza a pensar en las formas del suicidio, después lo intenta y la cuarta etapa es la consumación. De aquí la relevancia que tiene el tratamiento temprano y la prevención.

Entre las señales de alarma, que se deben tomar en cuenta y muy en serio están los cambios de conducta y sus principales manifestaciones son:
- Irritabilidad.
- Aislamiento.
- Aburrimiento, cansancio y necesidad de dormir en exceso.
- Incapacidad para disfrutar las cosas que antes les gustaban.
- Sentido de "hartazgo".- Alteraciones en el sueño y en la alimentación.
- Marcadas oscilaciones en el estado de ánimo.
- Aceleramiento o disminución en la psicomotoricidad.
- Falta de energía.
- Comentarios frecuentes sobre formas de suicidio.
- Pensamientos y expresiones negativas: “no puedo” “no la hago” “tengo miedo”, "no sé para qué vivo", "qué objeto tiene la vida", "prefiero morirme".

Ante una crisis suicida en el adolescente es de suma utilidad observar los siguientes principios:

1- Tratarlo con respeto.
2- Tomarlo en serio.
3- Creer lo que nos manifiesta.
4- Escucharle con genuino interés.
5- Permitirle expresar sus sentimientos (llanto, ira, disgusto).
6- Preguntar sobre la idea suicida.
7- Responsabilizar al adolescente con su propia vida, siempre que ello sea posible.
8- Trabajar juntos en encontrar soluciones no suicidas, por lo que deben explorarse soluciones alternativas al problema que ha desencadenado la crisis suicida.
9- Establecer un pacto no suicida siempre que el estado del adolescente lo permita. Para ello se le compromete a no autolesionarse durante la crisis.
10- Pedir permiso para involucrar a otros miembros de la familia, amigos y cuantas personas sea necesario para apoyar al adolescente.
11- Garantizar varias opciones para contactar con la persona que presta la ayuda psicológica, sean los padres y las madres, los maestros, tutores, médicos, suicidólogos, etc.
12- No juzgarlo, comprometiéndonos a guardar secreto de todas las confesiones que haga el adolescente.


Finalmente hay que añadir que cuando los síntomas de la depresión son graves y hay señales de que el paciente podría poner en peligro su vida, se debe acudir inmediatamente a un servicio médico especializado, a fin de iniciar con rapidez el tratamiento más apropiado.
Sin duda alguna estamos frente a una problemática compleja, con un sinfín de variables, pero la comunicación es un factor sumamente importante para erradicarlo aunado al amor familiar el cual en esos momentos es un factor primordial para combatir dicha problemática.


PSIC. SAFIR MICHELLE LEON VAZQUEZ